La Gran Canarias de "Aliados"
La película Aliados (2016) de Robert Zemeckis desarrolla la historia de dos agentes secretos que, después de trabajar juntos, acaban enamorados y deciden comenzar una vida en común un tanto descafeinada. Sin embargo, la pareja de actores Brad Pitt y Marion Cotillard no tienen ningún feeling en la pantalla, por lo que se convierte en una película anodina que no llega al nivel de largometrajes análogos como Sr. y Sra. Smith (2005) donde actúa el propio Brad Pitt con su ex-esposa, convirtiéndose de este modo en una película romance que entretiene pero no impacta y que ha pasado de puntillas por la gran pantalla.
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| Escena de Aliados grabada en la isla de Gran Canaria. |
A pesar de la simplicidad de la cinta y de su historia, el aspecto "demodé" y la ambientación en la Segunda Guerra Mundial está muy lograda, con una serie de decorados y paisajes realizados en España que merecen ser estudiados, pues han sido rodados en la isla de Gran Canaria. Antes de que el avión de los famosos actores aterrizara en la isla hicieron falta 5 meses de preparación previa que se reflejan en tan sólo una semana de rodaje. Pasamos a ver los lugares clave para el rodaje como la fábrica de hielo, la calle Núñez de la Peña o la plaza Cairasco y Malteses.
El primer lugar representativo para los decorados de Aliados es la fábrica de hielo que representa la embajada alemana donde se desarrollan las primeras escenas de acción de los protagonistas. La abandonada fábrica de hielo que se situaba en la calle Antonio Jorge Aguiar, fue un edificio polivalente que sirvió para realizar actividades de comedor social o que se convirtió en sede de los carnavales, para después transformarse durante una semana en un cuartel nazi de 1200 metros cuadrados repartidos en 4 plantas de altura. Es de las pocas veces que podemos ver un edificio real utilizado para una película sin que se le superpongan decorados superfluos que enmascaren su aspecto, el único arreglo que se realizó en el exterior fue la eliminación de elementos urbanos como señales de tráfico y bolardos. Finalmente, a pesar de que la construcción estaba protegida por su interés arquitectónico, el edificio fue derribado en 2016 por un convenio firmado entre los propietarios y el Ayuntamiento, que daba paso al levantamiento de dos edificios de quince y ocho plantas respectivamente, sustituyendo a unos de los pocos edificios industriales del siglo XX que quedaban en la capital grancanaria.
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| Fabrica de hielo de Gran Canaria convertida en embajada alemana nazi en la película Aliados (2016). |
En la plaza Cairasco se utilizó el edificio del Gabinete Literario para recrear el Hotel Bouchaid de Casablanca donde los personajes desayunan tranquilamente. En los primeros planos de la escena se muestra el día a día de la ciudad con vestimentas típicas, el mercado e incluso cómo se pasean los animales libremente por las calles. Para ello, a demás del gran trabajo de vestuario, se tuvieron que cubrir las calles con arena para recrear las calles sin asfaltar y subir el nivel de la carretera porque en los años 40 las aceras apenas tenían altura. Esta vez si hubo un trabajo de decorados auxiliares que imitaban los arcos de medio punto de los portales árabes donde se suelen colocar las terrazas de los famosos "cafetines" o pequeños puestos donde comerciar, es una de las características de la cultura marroquí que todavía podemos encontrar cuando viajamos al norte de África. Hicieron falta un centenar de piezas de alfarería que realizaron los artesanos de la Fundación para la Etnografía y Desarrollo de la Artesanía Canaria (Fedac).
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| Comparación del edificio del Gabinete Literario de Las Palmas en la película Aliados. |
Justo a la derecha del Gabinete Literario de las Palmas encontramos la plaza Manuel Becerra, otro de los emplazamientos de la película que recrearon las calles de Casablanca, pero esta vez, con ayuda del famoso croma azul. Conforme avanza la película se adapta la ambientación de las calles para crear un escenario diferente a cada vez y, a pesar de que el croma permite ahorrar dinero en mano de obra y material, luego exige un largo periodo de pos-producción.
Una de las primeras secuencias de la película está rodada la muy transformada calle muro donde, a las diez de la noche, Max Vatan (Brad Pitt) coge un taxi y se dirige a la oficina de correos de Casablanca (en realidad el Centro de Iniciativas de La Caja de Canarias) para volver a cambiar de coche y dirigirse, maleta en mano, a encontrarse con su falsa esposa.
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| Plaza Manuel Becerra de las Palmas durante el rodaje de la película Aliados (2016). |
Mientras Max espera a su compañera Marianne, se puede ver la plaza y el edificio que se usaron para recrear el hogar de los personajes durante sus días en Casablanca. El apartamento de Marianne no se modificó demasiado, simplemente se superpusieron algunos desconchones que deterioraran su aspecto pero sin embargo, las calles y los edificios colindantes necesitaron de un buen maquillaje que camuflara su imagen y ambientaran una ciudad dominada por los militares alemanes de los años 40 durante la Segunda Guerra Mundial.
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| Decorados del hogar en Casablanca (Marruecos) de los protagonistas en la película Aliados. |
Por último conoceremos el desierto donde los personajes hacen el amor apasionadamente mientras les envuelve una tormenta de arena. Cuando pensamos en los desiertos de Canarias automáticamente nos viene a la cabeza las dunas de Maspalomas, al sur de la isla en el municipio de Tirajana, pero esta vez se utilizaron los parajes desérticos de la isla vecina de Fuerteventura. La isla más antigua del archipiélago de Canarias está situada a 97Km de la costa del contienente africano y en 2009, fue declarada reserva de la biosfera por la Unesco, con una superficie total de 1659Km2 de paisajes paradisíacos.
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| Comparación de las dunas de la isla de Fuerteventura en la actualidad y en la película Aliados. |
El rodaje de Aliados (2016) de Robert Zemeckis supuso para la isla de Gran Canaria la recaudación de 20-25 millones de euros y la participación, de manera directa, de 340 personas de las cuales casi el 90% eran isleños canarios. La colaboración de la prensa, Gran Canaria Film Comission y del cabildo canario fue magnifica, sin causar molestias a los ciudadanos ya que, cuando había que cortar una calle se planificaba para no entorpecer el tráfico rodado, se gestionaron los permisos necesarios con gran rapidez y se fomentó la participación ciudadana en la super-producción estadounidense.
