Detrás de la medianera del hombre de al lado
El hombre de al lado es una película muy divertida del cine argentino que te hará pasar una gran tarde. La cinta dirigida por Mariano Cohn en 2009 trata la relación de dos vecinos muy diferentes que están condenados a entenderse, porque Víctor, interpretado por Daniel Aráoz, un hombre tranquilo que vive sin complicaciones ha abierto una ventana en la medianera que comparte con Leonardo, un diseñador estirado que vive en la casa más famosa de Buenos Aires: La Casa Curutchet diseñada por el arquitecto Le Corbusier.
La búsqueda de "rayitos de luz" por parte de Víctor chocará tremendamente con la vida idílica del diseñador Leonardo interpretado por Rafael Spregelburd, que de puertas hacia fuera tiene éxito en su trabajo, vive en una casa maravillosa con su mujer e hija bien avenidas y tiene grandes amigos a los que invitar a cenar los fines de semana... aunque claro, no es más feliz el que más tiene sino el que menos necesita. Todo el film se desarrolla en la casa familiar que, casualmente, usa como escenario el hito arquitectónico más famoso de la ciudad de Buenos Aires, el único edificio doméstico que construyó Le Corbusier en Sudamérica llamada La Casa Curutchet.
Le Corbusier con la maqueta de la Casa Curutchet de Buenos Aires. |
Todas las escenas de la películas son un deleite y una alabanza a la arquitectura del Movimiento Moderno de Le Corbusier y si os gusta el diseño y la decoración, el marco ambiental de la película pasará de un segundo plano a ser el protagonista del fotograma, con un claro homenaje al arquitecto suizo que revolucionó la arquitectura y la manera de construir. Por eso, desde No quedan cines de verano hemos querido hacer un artículo explicando la importancia de la casa y el porqué de su fama, para que cuando visualicéis el film no perdáis detalle.
Escenas de la película El hombre de al lado (2009). A la izquierda la rampa de acceso a la vivienda y a la derecha el comedor de la primera planta con vistas hacia el patio. |
La Casa Curutchet finalizada en 1955 es la primera vivienda que Le Corbusier diseña entre medianeras siguiendo sus 5 puntos de la arquitectura, principios que según el arquitecto debía seguir toda buena edificación. Se trata de los siguientes conceptos:
1º) Planta libre elevada sobre pilotis. La planta baja iba a estar dominada por el vehículo motorizado y por eso, el espacio debía estar lo más exento posible, limitando por unos pequeños pilares circulares que permitieran la circulación del coche.
2º) El uso de pilotis. Pequeños pilares circulares que formaban la trama reticular para la estructura del edificio, de tal modo que la tabiquería interior quedaba libre en el diseño.
3º) Cubierta entendida como una quinta fachada. La cual había que tratar como una terraza-jardín. Este punto se cumple en el volumen menor de la vivienda del doctor Curutchet, donde se encontraba la consulta. El cuerpo del consultorio médico formaría con su cubierta, una terraza para la vivienda unifamiliar.
4º) Fachada libre. Al liberar a la fachada de su componente estructural la fachada de la vivienda se puede componer libremente, como si fuera un retablo con el que deleitar a la ciudad.
5º) Uso de ventanas longitudinales. Ahora las ventanas se pueden extender por toda la fachada para mejorar la relación interior-exterior de una vivienda.
Tan importante fue la construcción de esta casa en Argentina que en 1987 fue declarada Monumento Nacional y en la actualidad, es la sede del Colegio de Arquitectos de la Provincia de Buenos Aires, un punto turístico que se puede visitar diariamente. La película El hombre de al lado (2009) refleja muy bien la importancia de los recorridos domésticos que tiene una familia, nunca se nos muestran a los personajes estáticos en un punto sino que sus recorridos por la vivienda, explican y contextualizan el momento del día que vivimos, sin obviar nunca la transición de un punto a otro del hogar. Le Corbusier también entendía de este modo el habitar de una casa y por eso propone diferentes maneras de recorrer la vivienda.
Interior de la Casa Curutchet en Buenos Aires. |
El acceso a la vivienda se propone como una prolongación de la vía urbana mediante una rampa que llega hasta un gran árbol propuesto por el propio arquitecto durante el diseño de la casa. El momento en el que la rampa se encuentra con la vegetación gira y continúa hasta la entrada de la vivienda unifamiliar. En el momento en el que se llega al ámbito privado la manera de circular se realiza a través de una escalera. El concepto está muy claro, la rampa une espacios mientras que las escaleras separan ambientes, se trata del promenade architecturale. Enmarcando la puerta de acceso a la vivienda se coloca un elemento de placas de hormigón que le otorga protagonismo al acceso y que encuadra el paisaje urbano cuando se realiza el recorrido de salida desde la rampa hasta la calle. Los promenades de la vivienda ofrecen quiebros inesperados que cambian las perspectivas, las vistas y el modo de mirar el entorno, pensamiento que la cinta de Mariano Cohn reafirma con la fotografía desde diferentes ángulos, la cual enseña las mismas habitaciones una y otra vez sin repetir el encuadre.
Visualización de los elementos para el promenade architecturale de Le Corbusier. La rampa une y la escalera separa. |
El conjunto arquitectónico se construyó en una parcela de 9x20 metros y se divide en dos volúmenes, uno dedicado sólo a vivienda unifamiliar y otro para el consultorio médico de su cliente, el doctor Curutchet. Los dos volúmenes dialogan a través del patio y de la famosa rampa de acceso. El volumen más privado se encuentra en el fondo de la parcela y se organiza en cuatro plantas en las que se superponen dos maneras de proyectar arquitectura. Por un lado se observa la trama ortogonal de pilotis que forman la estructura y por otro lado, los tabiques que al no ser estructurales combinan curvas con formas orgánicas para crear espacios únicos en cada estancia, creando a su vez espacios basados en su famoso modulor, el cual Le Corbusier explica por carta a su cliente de la siguiente manera:
Todo el proyecto se establece por medio del “Modulor” del cual el Sr. Amancio Williams podrá comentarle. Se trata de un sistema de medida armónica que hemos creado aquí hace más de 7 años y que aplicamos en nuestras construcciones, particularmente en el gran emprendimiento de “La Unidad Habitacional Le Corbusier” en Marsella. Es el ejemplo del “Modulor” (gama armónica) el que nos ha permitido realizar, por una parte, una economía considerable de volumen y, por otra, lograr una armonía que hubiera sido imposible sin el mismo. El gobierno francés me autorizó en Marsella a realizar una demostración oficial del “Modulor” comprobándose, es este momento, con una eficacia impresionante. Yo pienso entonces que hay motivos para solicitar para su obra una derogación de los usos en curso o por lo menos de las reglamentaciones vigentes en La Plata.
Modulor de Le Corbusier |
Además los cuatro niveles se jerarquizan.
- Planta sótano para las habitaciones de servicio.
- Planta baja como recepción al usuario de la casa.
- Primera planta, zona social con la cocina, el baños y el salón comedor a doble altura que convive con terraza-jardín y los brise-soleils de la fachada.
- Segunda planta, con las zonas más íntimas y los dormitorios
Planimetría de la Casa Curutchet de Le Courbusier. |
La única fachada de la vivienda está orientada hacia el norte y para proteger las estancias del sol se utilizan los brise-soleil, parasoles que actúan como colchón lumínico, térmico y funcional que también ofrecen un marco de placas de hormigón que vuelve a encuadrar las vistas hacia la ciudad. Contextualizar las perspectivas era muy importante para el arquitecto.
Momento selfie en El hombre de al lado contrastado con el dibujo del diseño de la fachada de Le Corbusier. |
Por último, además de disfrutar la historia de Víctor y Leonardo, tendréis que estar muy atentos a los revestimientos de los suelos que utilizan pequeñas piezas cerámicas de diferentes colores y texturas para diferenciar estancias y ambientes, que a su vez están ligados mediante los muros blancos. Igualmente, en los elementos singulares como la chimenea se utilizan colores vivos basados en su famoso modulor como el magenta, el negro y el azul.
El enfoque pictórico purista de Le Corbusier se ve reflejado en la dirección de la película que aprovecha la faceta de diseñador del protagonista para destripar el mundo del diseño, con momentos tan cómicos como la corrección que Leonardo realiza sobre las sillas de sus alumnos, cualquiera que haya tenido relación con el mundo de la creación artística no podrá parar de reír.