Una arquitectura muy espacial
En las novedades de la cartelera española encontramos la última entrega de la saga Star Wars dedicada a Han Solo. En no quedan cines de verano queremos aprovechas la ocasión para analizar el diseño y la estructura de las naves espaciales de la película.
Comparación de la nave de Dryden Voss con un rascacielos y un barco de vela. Película Han Solo: Una historia de Star Wars (2018). |
Como novedad en el film encontramos la primera nave de lujo y ocio del espacio. Lo que los protagonistas denominan "yate" no es ni más ni menos que un rascacielos flotante con todos los lujos posibles. La similitud con un rascacielos propio de Dubai no es sólo en la coraza exterior, también en las instalaciones y en la distribución de las estancias de la nave.
Los diseñadores de la nave han estado muy finos a la hora de crear un diseño exterior que sea híbrido entre un edificio de varias plantas y un barco, ya que se iba a denominar "yate". Puede que se hayan inspirado en el famoso edificio Marina Bay Sand de Singapur que lleva al extremo la formalidad de un barco suspendido en tres edificios rectangulares. Mucho más elegante, la nave de Dryden Voss es una combinación del casco de un barco de vela y la gracilidad de un edificio en altura.
Acostumbrados a que los personajes se desplacen en sentido horizontal por las naves espaciales, en el peculiar yate de Dryden Voss los desplazamientos se centran en torno a un ascensor típico de los hoteles de los años 70, un tubo de cristal dispuesto en la fachada. La única diferencia es que en vez de Las Vegas los personajes pueden ver la infinitud del espacio, un ligero cambio... Otro de los guiños a la arquitectura terrestre son los ojos de buey de los barcos que adornan todas las ventanas del yate espacial.
Por otra parte tenemos las vespas espaciales, en el inicio de la cinta cuando nos muestran la vida en Corellia. Se lleva a cabo una persecución urbana y los medios de transporte cambian de escala para adaptarse a las pequeñas calles de la ciudad. Tenemos el deportivo descapotable con Han Solo y Qi'ra, a los policías con las naves de dos ruedas y, por último, a los malos con naves blindadas análogas a los todoterrenos.
Y no podría ser menos, el mítico Halcón Milenario. Antes de adentrarnos en el análisis de la nave más preciada de Star Wars una pequeña anécdota: Al principio el Halcón Milenario tenía un diseño diferente pero, como a George Lucas no le gustaba porque se parecía demasiado a las otras naves del espacio, los diseñadores decidieron centrar sus esfuerzos en una hamburguesa a medio comer para que no les influenciaran las demás naves. La verdad es les salió genial la jugada y el carguero espacial fue único en su especie.
Muchos nos hemos fijado en que el Halcón Milenario luce diferente en en spin-off de la saga, y es que todavía pertenece a Landon Calrissian. La nave es la representación del dueño, en este caso un tipo con clase al que le gusta el lujo, la moda y buenos asientos de cuero.
Halcón Milenario en la película Han Solo: Una historia de Star Wars (2018) |
No son las primeras licencias sobre la nave que se ven a lo largo de toda la saga Star Wars. En películas originales la nave luce más chata que en los Episodios VII y VIII en los que los picos que flanquean la entrada a la nave se alargan para estilizar más el vehículo.
Como el carguero al que estaba destinado a ser, el Halcón Milenario centra su anatomía en una mercado o plaza donde disponer la mercancía, con la circulación de personas alrededor del puesto de ingenieros. A la izquierda, en un volumen añadido, el puesto de mandos destaca por ser de las pocas zonas acristaladas de la nave, la discreción de la mercancía es lo primero.
Espero que os haya gustado. ¡Nos vemos en una galaxia muy lejana!