La historia de las bandas sonoras de rock
En no quedan cines de verano no solo vamos al cine, también escuchamos la radio en busca de buena música. Gracias al programa de Rock FM "El decálogo de Mariskal" vamos a poder hacer un artículo que una ambas artes, la música y el cine.
Muchas de las cintas que vamos a nombrar a continuación no habrían tenido el mismo éxito sin las bandas sonoras que enmarcaban las escenas de la cámara. El rock se apodera de las historias cinematográficas con más repercusión de las últimas décadas:
Easy Rider (1969): Nacido para ser salvaje en como mejor podría describirse al protagonista Wyatt interpretado por Peter Fonda. Hay una escena muy reveladora en la que arroja el reloj a la arena del desierto, ya no tiene ningún tipo de ataduras, sólo le limita el depósito de su moto. Un dato curioso: con esta canción se empezó a denominar al género heavy metal.
La mítica escena de Easy Rider mientras suena Born to be wild de Steppenwolf creó a miles de moteros que viajarían a EEUU para hacer la ruta 69 por Arizona.
Quadrophenia (1979): Comienzan los cameos en las películas y esta vez vemos Sting vestido de botones sirviendo a la alta sociedad de Gran Bretaña. Mods con vespas italianas versus rockers con grandes motocicletas forradas en cuero a ritmo de The Who. Os dejamos la escena en la que suena Bell Boy.
Regreso al futuro (1985): Todos los frikys del mundo soñaron con tener su momento de gloria encima de un escenario gracias a este Johnny B Goode de Chuck Berry. Su particular sonido de guitarra marcaría un antes y un después en la historia del rock n roll y la película lo reconoce con esa conversación telefónica en entre el guitarrista y Marty.
Granujas a todo ritmo (1980): Toda la película te hace mover el esqueleto con el dúo musical de Blues Brothers. Ellos empezaron en una pequeña sección en el programa de televisión Saturday Night Live y consiguieron llegar a la gran pantalla gracias a esta película. Es de esas ocasiones en las que la música hace la película. Os dejamos con la escena de Every Body Needs Somebody to Love.
Forest Gump (1994): Duane Eddy y Rebel Rouser acompañan la icónica frase -corre, Forest corre-. Y nosotros sólo podemos decir una frase más -la vida es como una caja de bombones, nunca sabes lo que te va a tocar pero siempre puedes disfrutar del rock-
Pulp Fiction (1994): Reconocido por el propio Tarantino es la escena favorita del director. Se respira la tensión sexual entre los protagonistas y no hacer falta mover el culo a ritmo de twerking, el símbolo de la victoria pasando por la sensual mirada de Uma Thruman es suficiente para caer rendido a sus pies.
Ya sabemos que Travolta se mueve bien, pero la escena no hubiese sido lo mismo sin You Never Can Tell del maestro Chuck Berry.
Rocky III (1982): La canción de Eye of the Tiger es todo un símbolo para los deportistas del mundo. Cuantas imitaciones ha tenido esta escena de escalones infinitos... Survivor no fue el único candidato para la película, también se barajó la posibilidad de que sonara Another One Bite de Dust de Queen ¿habría tenido la misma repercusión?
El graudado (1967): Es hora de contar la verdadera historia de la canción Mrs Robinson: En esa época Simon y Garfunkel estaba de gira por Europa sin mucho tiempo para componer y cuando el director le solicitó una muestra de sus composiciones, Simon sólo pudo enseñarles una canción dedicada a la ex primera dama de Estados Unidos Eleanor Roosbelt. La solución a los problemas de ambos fue sustituir Mrs Roosbelt por Robinson y listo, ya tenemos un gran éxito para la película.
Wayne's World ¡Qué desparrame! (1992): Opera prima de del director Mike Myers, conocido también como Austin Power, eligió la fantástica canción compuesta por Freddie Mercury, el cantante de Queen.
Un dato curioso que podemos arrojar sobre la composición de Bohemian Raspody es que Freddie nunca llegó a desvelar el significado que tenía para él la canción, pero sin duda implica muchos sentimientos y recuerdos para el autor que con tanta pasión la cantaba. Se han barajado muchas intenciones de Mercury durante su composición y lo único que tenemos claro es que sólo un genio como él habría sacado una obra maestra al mezclar una introducción a capela, una balada, un sólo de guitarra, una ópera, un rock y una cola que culmine la pieza.
Apocalypse Now (1979): Culminamos con la película del director Francis F. Coppola y este temazo de The Doors. This is the end, my only friend, the end.