La vida de Rocketman
Llega el musical (muy fantasioso) basado en la vida y obra del legendario Sir Elton John, llega Rocktman.
Elton sale agobiado de uno de sus espectáculos y se mete directamente en un centro de rehabilitación. Allí, admite todas sus adicciones y rememora su vida, desde su infancia hasta la actualidad. Con su difícil vida familiar, su éxito arrollador, sus amantes y su caída en el mundo de los excesos.
No estamos ante un musical al uso. Mitad biopic, mitad ópera trágica, tenemos un vistazo al histriónico genio, acompañado de su propia música en un viaje delirante de la mano de Dexter Fletcher.
Destacan la cinematografía y los números musicales. De estos últimos particularmente The Bitch is Back, en el que un diminuto Elton, cuando todavía era Reggie Dwight (Matthew Illesley) se mezcla en color con su familia y su vecindario en sepia; I want love, en la que toda la disfuncional familia Dwight se une momentáneamente; Pinball Wizard de The Who, en la que se ve su transformación en la diva que es hoy, y Rocket Man, en su surrealista intento de suicidio.
En cuanto a las actuaciones... Bueno, si Elton (Taron Egerton) acaba en la carrera de los Oscar, no pienso discutirlo. Es capaz de converger tanto el pavo real emplumado, como al pianista orquestal, como al juguete roto en que acabó convirtiéndose. Otra mención se merecen su madre (Bryce Dallas Howard), el mejor amigo y compositor Bernie (Jamie Bell), el productor Ray Williams (Charlie Rowe) y John Reid (Richard Madden), el despiadado 2º productor/amante. Muy interesante tanto como si no eres fan de Elton como si no te gustan los musicales.