Cartas a Roxane: La obra más grande del teatro francés
Veinte minutos de aplausos ininterrumpidos en la primera representación de Cyrano de Bergerac es la mejor carta de presentación que puede tener la obra pero.... ¿Su autor sabía que su obra llegaría a alcanzar el éxito? Para nada, de hecho, Edmond Rostand pidió perdón a todos los actores 10 minutos antes de empezar la primera representación de Cyrano, según él, los había involucrado en tal fracaso teatral que acabaría con sus carreras profesionales.
Cartas a Roxane es una comedia francesa que cuenta el momento de inspiración del escritor para crear la obra que le llevaría a los libros de historia. Edmond Rostand estaba en dique seco tras haber fracasado en sus obras de teatro anteriores, cuando de repente, conocer a Sarah le hace escribir de nuevo.
Con un ritmo ágil y ligero, la cinta empieza con el corte clásico de las películas de amor. Un protagonista desgraciado que queda envuelto en los líos amoroso de su mejor amigo y que le llevarán a encontrarse con su musa, una joven actriz a la que le apasionan las cartas de amor. Esta desenfrenada inspiración hará que el escritor tenga que elegir entre la amistad, la fidelidad a su esposa, su obra magistral o la pasión amorosa.
Para que no haya confusiones, queremos aclarar que la cinta se toma muchas licencias artísticas, la historia de cómo se escribió Cyrano de Bergerac no es como se plasma en la película. De hecho, se podría decir que lo único que es 100% seguro es que el dramaturgo estaba poco inspirado antes de comenzar Cyrano y de que tenía una joven actriz como amante. Lo que está claro que es que el director Alexiz Michalik no pretendía dirigir un documental histórico.
Para nuestro deleite, se trata de una película colorida, con personajes alegres y animados con gran sentido del humor. Los hechos históricos no son importantes. Un homenaje al cine y a la obra de Cyrano, un hombre juzgado por su nariz y no por su intelecto.
Cartas a Roxane os hará pasar un gran rato en casa. Para terminar un dato curioso, Edmond Rostand murió dos décadas después en la pandemia de Gripe Española...¿Os suena de algo?
