No quedan cines de verano

La madrugada del 22 al 23 de febrero en España fue un momento histórico para el cine español. Penélope Cruz levantaba el Oscar como Mejor Actriz Secundaria por su papel en Vicky Cristina Barcelona y pronunciaba su icónico discurso de "I grew up in a place called alcobendas". 13 años después, aunque es complicado, podemos volver a ilusionarnos con una madrugada que nos traiga una nueva estatuilla para la actriz.

Penélope Cruz ha logrado previamente 3 nominaciones a los Oscars. La primera la obtuvo en el año 2007, en la categoría de Mejor Actriz, por su papel de Raimunda en la película de Pedro Almodóvar Volver. Ese año Helen Mirren arrasó en la carrera de premios por su papel de Isabel II en The Queen, logrando el SAG, el Globo de Oro, el BAFTA y el Critics´s Choice y, por supuesto, el Oscar. El premio para Cruz fue aquella nominación, además por un papel en español.

Dos años después llegaría su segunda nominación, en esta ocasión en la categoría de Mejor Actriz Secundaria por Vicky Cristina Barcelona de Woody Allen. Ese año fue una temporada curiosa, Kate Winslet hacía doblete de películas en la carrera con Revolutionary Road y El lector. En los globos de oro Winslet se marcó un doblete ganando Mejor Actriz Dramática por Revolutionary Road y Mejor Actriz Secundaria por El lector.  En los Critics´s Choice y en el SAG Winslet competiría como secundaria por El lector logrando ambos galardones, pero la sorpresa saltaría en los Oscars. Pese a haber sido promocionada como Secundaria, en los Oscars fue nominada como Mejor Actriz por El lector. La categoría se quedaba huérfana de la gran favorita. El quinteto en Mejor Actriz Secundaria lo formaban a parte de Cruz, Viola Davis y Amy Adams por La duda, Marisa Tomey por El luchador y Taraji P. Henson por El curioso caso de Benjamin Button. El BATFA, el único gran precursor donde Winslet compitió como principal (ganándolo por cierto) fue a parar a manos de Cruz. Lo que sucedió en la noche de los Oscars es ya historia de nuestro cine.

Penélope Cruz con su Oscar en 2009

Finalmente, justo un año después de su Oscar, Penélope Cruz repetía nominación en la Categoría de Mejor Actriz Secundaria por Nine. Mo´Nique por su papel en Precious fue la gran dominadora de la carrera logrando todos los premios previos y también el Oscar. Una carrera muy cerrada desde el principio que no deparó ninguna sorpresa.

Y con este bagaje, llegamos a la nominación de 2022, otra vez como en 2009 con una categoría  muy abierta y en la que no existe una clara favorita.

Penélope Cruz ha estado ausente en los principales precursores, no logrando estar nominada en ninguno de ellos. Lo difícil era llegar a estar en el quinteto de nominadas con el nivel que había este año y sin ser Madres Paralelas la cinta elegida por España para la categoría de Mejor Película Internacional. El sueño era lograr la nominación, pero ahora, viendo lo abierta que está la categoría y que no hay favorita, la división de voto le puede permitir dar la campanada. Cruz cuenta en su aval con el premio de Mejor Actriz en el pasado Festival de Venecia y las victorias en las asociaciones de críticos de Los Ángeles y la NSFCA. A priori un bagaje insuficiente, pero vamos a analizar como llegan sus 4 rivales:

Kristen Stewart. La actriz era al principio de la carrera la principal favorita por su papel en Spencer, la obra de Pablo Larraín sobre la vida de Diana de Gales. Y la carrera de Stewart hacía el Oscar comenzó muy bien arrasando en los premios de la crítica, los problemas llegaron después. Perdió el Globo de Oro contra Nicole Kidman y no fue nominada ni a los SAG ni al BAFTA, poniendo en duda su presencia en los Oscars. Ahora mismo, es la gran favorita para ganar el Critics´s Choice, este premio puede marcar su punto de inflexión. Una victoria le devolvería a los titulares para ganar el Oscar, metiéndola de lleno en la batalla, una derrota confirmaría que no es la favorita y que hay otras alternativas.

Olivia Colman. La intérprete ha encadenado unos años excelentes. Logró el Oscar hace 3 años por su papel en La favorita, estuvo nominada el año pasado como secundaria por El padre y ha logrado premios televisivos por su rol de Isabel II en The Crown. Es una actriz en un gran momento profesional que ha estado presente en todos los precursores, salvo el BAFTA por su papel en The lost daugther. Eso sí, hasta ahora sus victorias se han circunscrito a algunas asociaciones de críticos como San Francisco. No parte como favorita, pero hay que tenerla en cuenta dado que ha estado presente en toda la carrera y este podría ser votada para el Oscar como reconocimiento a su gran momento.

Jessica Chastain. A principios de la pasada década Chastain encadenó dos nominaciones consecutivas a los Oscars y parecía que era cuestión de tiempo que se alzara con el dorado galardón. Tras 9 años de ausencia regresa a los premios con Los ojos de Tammy Faye en la que da vida a la telepredicadora que es una institución de la cultura popular en EEUU. La interprete acaba de lograr el SAG a mejor actriz y se disputa con Kidman ser la frontrunner en la carrera. El gran handicap de Chastain es que interpreta a un personaje muy poco conocido fuera de las fronteras de EEUU lo cual puede lastrarle a la hora del voto de la rama exterior de la Academia. Aún así hasta el final el nombre de Chastain va a estar el candelero por el Oscar.

Nicole Kidman. Con Las Horas en 2003 Nicole Kidman logró su primer, y por ahora, único Oscar. En Being the Ricardos Kidman interpreta a la actriz Lucille Ball protagonista de la famosa sitcom de los años 50s Te quiero,Lucy, con una caracterización muy lograda. Kidman ha logrado por este papel el Globo de Oro a Mejor Actriz Dramática, pero ha perdido en el SAG frente a Chastain. Su dilatada carrera llena de títulos muy recordados y el tiempo que ha transcurrido desde el primer galardón hacen que parte con cierta ventaja sobre las demás.

Como podemos observar, nos encontramos con un quinteto muy igualado. Históricamente el SAG ha sido la mejor garantía para el Oscar, en los últimos 10 años ha coincidido 7 veces con el Oscars. Eso sí, en los últimos tres años solo ha coincidido con el Oscar el año de Renée Zellweger, en 2019 el SAG fue para Glenn Close y el Oscar para Olivia Colman y, el año pasado, el SAG fue para Viola Davis y el Oscar para Frances McDormand.

Si tomamos como referencia los precursores del año pasado nos encontramos con la siguiente situación: el SAG fue para Viola Davis, el Globo de Oro para Andra Day, el Critics´s Choice para Carey Mulligan y el BAFTA para  Frances McDormand. Llegábamos a la gala con 4 ganadoras diferentes en los cuatro grandes precursores, siendo decisivo en este caso el BAFTA. Este año se da la circunstancia de que ninguna de las seis nominadas al BAFTA está nominada a Mejor Actriz en los Oscars.

Nos encontramos con un carrera muy abierta, dónde una de las teóricas favoritas como Lady Gaga por La casa Gucci, la única presente en todos los precursores, no se encuentra ni nominada. Una muestra de lo igualado que parece estar todo este año. Con este panorama, cualquiera de las cinco tiene buenos argumentos para lograr llevarse el premio a casa. 

Y justo ahora se está rumoreando la posibilidad de que Penélope Cruz pueda ser presidenta del Jurado en el próximo Festival de Cine de Cannes, un golpe de visibilidad que podría otorgarle algún voto extra. Realmente el Oscar de Penélope Cruz es casi utópico pero, habiendo logrado entrar en el quinteto en un contexto tan igualado, siempre se puede soñar con un segundo Oscar. En el caso de que ni Kidman ni Chastain logren el Critics´s Choice, nos encontraríamos con un panorama sin una frontrunner fuerte y, es en ese terreno, dónde Cruz podría brillar con luz propia.